jueves, 28 de marzo de 2013

El salmón transgénico.

Después de 23 años de exámenes, una empresa estadounidense supera el penúltimo obstáculo antes de poder vender al por mayor el salmón.
Toda esta investigación tiene el fin de conseguir que el salmón transgénico alcance los 100 gramos necesarios para su captura mas rápidamente que un salmón salvaje.

Hace dos años, surgió el principal escollo: el ambiental. ¿Qué ocurriría si uno de estos salmones hercúleos y con anticongelante se escapara de la piscifactoría? ¿Romperían el equilibrio ecológico al imponerse sobre sus primos no modificados genéticamente?

Todo esto nos lleva a la misma conclusión, que después de décadas de consumo de cultivos transgénicos, los animales transgénicos para alimentación siguen atascados. Un claro ejemplo es este, con el cual se lleva investigando desde 1989.